- Limpiar los alcauciles quitándoles las hojas duras y dejando solo su parte tierna.
- Cortarlas puntas y sumergirlos en abundante agua con el jugo de un limón para que no se oscurezcan mientras se preparan las verduras. Reservar.
- Cortar la cebolla, la parte blanca del apio y las zanahorias en fina juliana.
- Colocarlas verduras en una cacerola y sobre ellas acomodar los alcauciles bien escurridos, entreabriendo un poco sus hojas.
- Distribuir los ajos picados y las hojas de laurel.
- Agregar el vino blanco, el vinagre, el aceite y el agua. Condimentar con sal y pimienta.
- Tapar la cacerola y llevar a fuego medio hasta que los alcauciles estén tiernos. No conviene revolver mientras se están cocinando, solamente hacer girar la cacerola un poco tomándola por las asas.
- Una vez que esté lista esta preparación, pasarla a un bol y dejarla enfriar un poco. Luego llevar a la heladera.
- Para consumirlos, retirarlos media hora antes de la heladera para que tomen temperatura ambiente, de esta forma se podrá apreciar mejor su sabor.
- Se pueden acompañar con papas al natural.