De intenso sabor, con matices amargos y leves sensaciones dulzonas, las coles de Bruselas, son una fuente natural de antioxidantes beneficiosos para nuestra vista, piel, oídos y aparato respiratorio, además de reconstituir y mejorar la belleza de la piel. Se caracterizan por su alto contenido de vitamina A, vitamina C y ácido fólico. Al ser ricas en clorofila, ayudan a la formación de la hemoglobina y a combatir la anemia. También son un alimento rico en vitamina K y en diversos minerales, que en su conjunto benefician la correcta coagulación de la
sangre y el metabolismo de los huesos. Las coles de Bruselas hervidas son sencillas de preparar, sabrosas y muy nutritivas. También se pueden cocinar al vapor y así concentrar más sus nutrientes. Pueden constituir un primer plato o servirse como acompañamiento de otras verduras y hortalizas en platos principales.